En 2020 tuvimos que aprender a ser versátiles en muchos aspectos de la vida. El impacto de la pandemia trastocó nuestras rutinas y hábitos, incluso los espirituales, pero gracias a la capacidad de adaptación y a las herramientas tecnológicas, fue posible continuar la práctica de algunos de ellos.
Con más de 17 millones de miembros en todo el mundo, los adventistas del séptimo día son una iglesia cristiana protestante establecida desde 1863 en los Estados Unidos
Debido a la crisis sanitaria por el virus de la COVID-19, la iglesia se enfrentó con el reto de dar continuidad a sus actividades en formato virtual para salvaguardar la integridad de sus feligreses.
Para nosotros en Nett fue un honor tener la oportunidad de trabajar con la DIA (División Interamericana – Iglesia Adventista del Séptimo Día), aportando nuestro trabajo y experiencia para fortalecer la comunicación de sus miembros mediante el uso de herramientas digitales.
Atendiendo a las indicaciones de las autoridades sanitarias para cuidar la salud de todos, las reuniones de la iglesia se comenzaron a celebrar de manera virtual. Por ello, el desafío de este proyecto consistía en mejorar y facilitar la experiencia de los usuarios y administradores en sus comunicaciones. La idea era diseñar una interfaz amigable para una plataforma de salas virtuales en las cuales se llevan a cabo reuniones y conferencias.
El proceso para la realización de este proyecto se dividió en tres partes:
Aspectos importantes a considerar:
Nuestro objetivo principal en cada proyecto es satisfacer las necesidades del cliente con una propuesta de valor original para superar sus expectativas.
Ejecutar dicha propuesta, sin embargo, requiere de una administración eficiente y disciplinada. En este caso, la planeación mediante entregas semanales, así como la distribución de tareas por plazos dentro del equipo, nos permitió desarrollar el proyecto de forma satisfactoria y sin contratiempos en cada una de sus etapas.
De igual forma, la retroalimentación constante con el cliente al respecto de la planeación y las entregas hizo posible pulir el resultado final para hacer realidad la propuesta de valor presentada desde el inicio.